Gil Soto, Jose Luis (2019)
Madera de savia azul
EDICIONES B, Barcelona, 638 pp
ISBN: 978-84-666-6535-3
El destino de un niño.
Erik tiene apenas cuatro años cuando pierde a su madre en
el gran terremoto que destruye Waliria, la capital de Ariok. Su padre, el
carpintero Bertrand de Lis, y Astrid, la humilde viuda de un herrero, no pueden
imaginar que la catástrofe no solo cambiará sus vidas para siempre, sino que,
sin quererlo, les hará dueños de secretos que nunca hubieran querido tener que
guardar.
El viaje hacia un reino de leyenda.
Tras el desastre, y alentado por una profecía, el rey
decide emprender con su pueblo un peligroso viaje hasta tierras del sur. Una
gran caravana se pone en marcha. La esperanza, el miedo y la ambición viajan
con ellos.
La búsqueda de un padre.
A Bertrand solo le queda su hijo, y su única preocupación
es cuidarle, pero un hecho inesperado cambia el rumbo de sus vidas. Así, quien
era solo un hombre bueno y sencillo, se convertirá en protagonista de una
aventura épica, impulsada por el profundo amor a su hijo y su deseo de volver a
reunirse con él.
Los agoreros dijeron luego,
cuando ya había sucedido el desastre, que los dioses no permiten a los hombres
vivir placenteramente durante demasiado tiempo y que su ira se vierte
conisentica furia tanto si los humanos abrazan el mal como si experimentan demasiado gozo
De no ser por la iniciativa de lectora
#SoyYincanera probablemente esta novela hubiera pasado por mis ojos pero nunca
por mis manos y me habría perdido conocer una gran historia y disfrutar de una magnífica
novela.
Si buscáis una historia de fantasía desbordante con dragones,
magos y mazmorras, estáis muy lejos de encontrarla, por más que muchos se
empeñen en catalogar esta historia dentro del género de la fantasía.
Madera de savia azul tiene de "fantástico" el reino de Ariok y hasta ahí.
Está novela es una historia de superación, una historia de personajes obligados a buscar una nueva vida cuando todo se ha perdido.
Es una historia de aventuras, si lo es, pero es, sobre todo
una historia de personajes, de sentimientos, de todo lo que el ser humano tiene
de bondad y de maldad, de lo que aflora de nosotros cuando las cosas van bien
pero sobre todo cuando las cartas vienen mal dadas.
Esta no es una novela corriente y por lo mismo
esta no será una reseña corriente.
No voy a extenderme en los personajes porque son muchos y
complejos y no se entenderían fuera de esa trama en la que tampoco voy a ahondar
porque resumir tantas páginas, tantos matices en unas líneas, me parece casi
irrespetuoso.
Lo que puedo aseguraros es que descubrir a estos personajes
en sus circunstancias y en sus lugares, en sus vidas, es una verdadera delicia,
una sensación que estoy segura de que disfrutareis.
Porque la historia esta urdida de forma tan coherente, que
todo su desarrollo es verosímil, que cada paso dado por los personajes nos
dirigen indefectiblemente a un final inesperado, pero en absoluto forzado, un
final sorprendente que cierra con broche de oro una historia redonda.
José Luis es capaz de describir como nadie el dolor de la pérdida
de los seres queridos y la necesidad de sobreponerse, de seguir adelante, de
sacar fuerzas de flaqueza, de sonreír aun cuando no se pueden contener las
lagrimas.
Es fiel cuando describe la perdida de las raíces, la
necesidad de abandonar lo que, a priori, no son más que bienes materiales, pero
que son mucho más, que son los cimientos de una vida, que son un pasado que es
necesario dejar atrás y enfrentarse al miedo a lo desconocido, a un futuro que se
sustenta en una verdadera utopía.
Pero sobretodo el autor transmite con sus palabras los
SENTIMIENTOS, así, en mayúsculas.
Los más sublimes y los más ruines, porque esta historia es
una historia de buenos muy buenos y de malos muy malos, terriblemente malos.
Dos polos totalmente opuestos, el bien y el mal, el blanco y
el negro que representan Bertrand y Barthazar y entre los que existe una amplia
gama de grises que visten a un gran elenco de personajes, grandes y viles
hombres y también grandísimas mujeres que acompañan a estos dos tremendos protagonistas.
De
repente, allí tumbado sin lograr atisbar gran cosa de la obra del maestro, una
inexplicable sensación de haber vivido ya aquel instante se apoderó de él. En
principio lo atribuyó a esos momentos en que de vez en cuando se tiene la impresión
de estar viviendo por segunda vez una misma experiencia, pero pronto descubrió,
para su asombro que no se trataba de un segundo tiempo de idéntica vivencia,
sino del embargo intenso que le producían aquellos aromas, la cercanía de la madera
y sus tonos cambiantes al compas e los nudos y las vetas.
Las precisas
descripciones te llevan a recorrer caminos y llanuras inmensas, a perderte en los
bosques frondosos, a sentir el olor de la muerte en los campos de batalla, a
pasear por bellos palacios… y todo ello a través de un lenguaje preciso, de una
prosa cuidada, de los diálogos precisos y las palabras justas. Y si, digo las palabras justas, aunque os
pueda parecer una locura decir esto cuando hablamos de una novela de casi 700 páginas,
pero es que a esta historia no le sobra ni una coma.
Cuando
os acerquéis a la novela, y lo haréis si estáis buscando una lectura que, como
a mí, os saque de vuestra zona de confort, no esperéis encontrar una historia
bonita, pero estad seguros de que vais a encontrar una magnifica historia.
Hay
cosas que suceden porque han de suceder y no merece la pena detenerse a pensar
que pasara el día en que esa sucesión mágica se rompa. Y tal vez, por esa
tendencia natural del hombre a pensar que lo que ha sido siempre, siempre
seguirá siendo, crecía el desconcierto en cada uno de ellos sin que ninguno se
atreviese a manifestarlo para no alarmar al prójimo.
Verdaderamente es una delicia leer las descripciones. Te hacen sentir parte de la novela viendo y sintiendo todo lo que acontece con una precisión inigualable. Muy buena reseña. Besines.
ResponderEliminarTotalmente de acuerdo. Una gran reseña para una gran novela. Toda una sorpresa esta lectura.
ResponderEliminarBesotes!!!
Comparto contigo, punto por punto, la percepción que has tenido con la lectura. Una historia brillante que nos traslada a un mundo imaginario, con unos personajes perfectamente construidos que nos muestran todas las caras de los seres humanos.
ResponderEliminarEs cierto que la novela te saca de tu zona de confort pero vaya regalazo no? he disfrutado mucho con su lectura, tanto como tu por lo que leo, una gran historia de esas que te llegan y que estarán en tu recuerdo por mucho tiempo. una novela para desconectar y disfrutar a partes iguales.
ResponderEliminarTienes razón lo que mejor destaca el autor son los sentimientos que produce ese difícil viaje, tanto los de pérdida como los de triunfo y alegría. La sensación es no poderte despegar de sus páginas.
ResponderEliminarBesos
Comparto totalmente tu opinión Gema, es una historia con mayúsculas. El autor ha sabido transmitir tanto sentimiento que las emociones se desbordan. Una novela magnífica que espero tenga pronto continuación. Un beso
ResponderEliminarEfectivamente, esta no es una reseña corriente. Claro que tampoco me extraña ya que siempre, bien porque salgas de tu zona de confort o por mil y un motivos, siempre es una delicia leerte y más cuando se comparte cada una de tus impresiones.
ResponderEliminarUn beso.
UNa joya de novela que tú has sabido reseñar fenomenal para que quien no la haya leído todavía se anime a ello.
ResponderEliminarHola. A mí me sacó de mi zona de confort y no me esperaba que me gustase tanto. Como he disfrutado, mucho. Excelente novela como tu reseña. Besos.
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