El pasado día 1 de Junio
asistimos a la presentación de la última novela de Martí Gironell “La fuerza de
un Destino” uno de los libros más vendidos en Sant Jordi en su versión catalana.
La cita tuvo lugar en el Arzábal
Museo Reina Sofía, un espacio encantador que esta presentación me dio la
oportunidad de descubrir.
Comenzó la editora introduciendo
esta novela, basada en una vida real, en un personaje real como es el cántabro Ceferino Carrión.
La presentación corrió a cargo
del autor, que acompañado por el también
escritor Javier Sierra, mantuvo una interesante conversación que nos llevó a
conocer la obra y mucho de lo que hay detrás de ella.
Define Javier la novela como una
novela de vida, en una época en la que cada
vez tenemos más necesidad de realidad
pero también de modelos sociales y el protagonista de esta historia Ceferino
Carrión, Jean León se ha convertido a través de la pluma de Martí en uno de
esos modelos.
Es ésta una historia que se
inicia al finalizar la guerra civil, en una situación política complicada, en el momento
en que comienza la persecución de los vencidos, bando al que Ceferino pertenece
por haber nacido en una zona determinada y en el que no cabe más que huir, para
intentar sobrevivir.
Ceferino tiene un punto temerario
que necesita todo emprendedor, todo visionario, un punto que se necesita para huir y dejar
todo atrás, y presenta una característica única que le hace único y es que
Ceferino cambia de identidad en cada uno de sus puertos de huida y esos cambios
de identidad son como empezar de cero.
Martí lo define como el eterno
insatisfecho, aquel, que como tantos, busca una vida mejor, que en su caso pasa
por llegar a los Estados Unidos.
Nos hablaba Martí de sus fuentes,
de las fotos, de las conversaciones con
esas personas que conocieron a Jean León, última de sus identidades, nos
hablaba de lo que ellos sabían, que no fue ni más ni menos que lo Jean quiso,
ya que muchos de sus secretos se los llevó con él. A través de esas fuentes y
para llenar estas lagunas y cumplir los sueños que, en vida, le quedaron por cumplir, el autor ficciona la vida de Jean hasta convertirlo en lo que es
una vida de novela.
Nos hablaron sobre la vida de
Ceferino en Los Ángeles, sobre como ejerce de camarero y taxista conociendo a los mejores actores de la época dorada del Hollywood, de los años 50
y 60, sobre todo de su relación con
Frank Sinatra, James Dean, con quien abre su restaurante La Escala, Ronald
Reagan, no solo en su faceta de actor sino también como presidente, ya que en
su toma de posesión también Jean estuvo
presente en forma de vino; de Marilyn
Monroe y esa ultima cena que salió de sus manos… un puñado de historias
maravillosas que conocemos también a través de las biografías de estos
personajes reales, pero cuyos inicios y
muchos detalles, Ceferino guardó para sí,
porque una de sus características, según el autor, es que era muy bueno guardando secretos.
En su aventura americana, y en
ese restaurante donde los platos tenían nombres de actores, Jean Leon sueña con
un vino que maride perfectamente con sus creaciones y así se fragua su vuelta, “sui
generis” a España, a ese Penedés, en el que hará, también el sueño de crear sus
propios caldos realidad.
Y cuando su final se acerca, Jean
Leon, vende los viñedos y toda su producción a las bodegas Torres, con la condición
de que a sus vinos no se les añada ninguna referencia de ésta, sino que siga
manteniendo su esencia y su nombre, Jean Leon 3055, siendo estas cifras el
numero de su licencia de taxi en Nueva York. Y de ese vino nace el germen de la novela, cuando en una comida
organizada hace tres años por El Mundo que se celebró en la Vinoteca Torres y a
la que Martí fue invitado junto a otros
autores (Cristina Fernández Cubas, Víctor del Árbol, Carmen Riera y Albert
Espinosa), en las que tomaron sus vinos, la persona de las bodegas que les
acompañaba les habló del personaje que había
detrás de la botella incidiendo en el hecho de que de su vida bien podría hacerse
una adaptación al cine, al teatro, a la televisión o incluso a la literatura,
guante que Martí recogió con entusiasmo.
La fuerza de un destino es una
novela histórica e inspiradora, motivacional, la historia de una vida llena de
objetivos alcanzados, el éxito de un hombre, pero en la que no ha querido el
autor pasar por alto el precio que hay que pagar por cumplir esos sueños, o
mejor dicho, el precio que tuvieron que pagar los que vivieron estos sueños
junto a él. Se centra Martí en Kate, esa esposa con la que Jean compartió 22
años de su vida, un personaje casi gris entre todos esos astros que rodearon la
vida del protagonista.
Tras esta maravillosa charla y
con las ganas de comenzar la lectura de esta historia lo antes posible, Martí
nos dedicó los ejemplares, posó para todas las fotos que quisimos hacer, con él
y con Javier, y nos invitó a degustar los vinos de los que nos habló durante la
presentación, vinos que recomiendo encarecidamente, sobretodo el blanco frio
que tan agradable resultó degustar en la terraza del local aquella tarde noche
de primavera.
Fue una presentación magnifica en
un magnifico entorno y estoy segura de que esta será una gran lectura, una
historia cuyo mensaje podría resumirse según palabras del autor como:
“Nunca es tarde para soñar, nunca
es tarde para hacer realidad esos sueños”