Los tiempos han cambiado y el pasado día 4 de diciembre transformamos el encuentro en el centro de Madrid por un encuentro en el que nos vimos y nos oímos a través de una pantalla, pero cada una en nuestro sitio. Es lo que tiene esta pandemia que nos obliga a cambiar las formas pero no va a conseguir que renunciemos a la afición que nos une, leer y hablar de libros.
Durante la hora larga que duró nuestro encuentro tuvimos tiempo de charlar del pasado, de esos libros de la autora que tan bien conocemos y de los secretos que guardan y hablamos, sobre todo, del momento actual, de la situación que estamos viviendo y de la posición en la que se encuentran los autores, las editoriales y las librerías en estos difíciles tiempos que corren.
En realidad hablamos de la cultura en términos mucho más amplios, no solo de la literatura, sino del ámbito cultural en tiempos de pandemia, un entorno que Pilar conoce sobradamente ya que a su faceta de escritora hemos de añadir la de guionista y directora de cine, y si hay algo indudable es que Pilar tiene oficio en esto de las letras, porque, como ella dice “escribe todo el día” y de su oficio hablamos, y mucho, en nuestra charla.
La circunscripción de las novelas en géneros ocupó gran parte de nuestro debate, en el que en el fondo todas estamos de acuerdo. En la mayoría de las ocasiones el género sirve, no solo para etiquetar las novelas, sino para etiquetarnos a nosotros mismos, para cerrarnos el camino en función de la etiqueta que ostentemos, para explicarnos las cosas como si fuéramos incapaces de decidir por nosotros mismos y todo nos debiera ser dado.
Este es un tema escabroso y que da lugar a miles de subtemas, uno de los cuales y que no podía faltar en este encuentro es la denominada “literatura de mujeres” termino que, personalmente, me chirría…
Os aseguro que lo hablado dió para mucho más de lo que soy capaz de transcribir en este espacio demostrando de nuevo que lo mejor de estos encuentros es poder hablar libremente de lo “humano y lo divino” y comprobar que los lectores no estamos tan lejos del autor que nos cautiva con sus historias.
Lo cierto es que entre ideas, reflexiones y risas, el tiempo se nos pasó volando, aunque aún tuvimos algo de tiempo para centrarnos en “El jardín de los Espejos”, sobre la complejidad de esta historia y sobre la complejidad que supuso para la autora escribirla y cuyos secretos de creación nos permitió conocer, una verdadera obra de arquitectura, si se me permite el símil.
Si no habéis leído esta novela os estáis perdiendo una magnifica historia, nuestras opiniones tras su lectura podéis leerlas los Blogs Negro sobre blanco, La coleccionista de libros y otras cosas y Leyendo bajo la luz de la Luna, y a continuación encontrareis las preguntas y respuestas que nos quedaron en el tintero y que Pilar ha tenido a bien contestarnos a través de correo electrónico, porque pasa con el tiempo, que es limitado y se nos quedo corto en el encuentro para todo lo que queríamos saber.
1.- ¿De dónde nace la inspiración para escribir esta novela?
El origen, el momento en que decides escribir sobre una cosa y no otra resulta la parte más misteriosa de inventar historias. En este caso, puede que haya dos líneas que se cruzan y prenden una chispa: por una lado las pinturas rupestres de las cuevas de El Castillo en Puente Viesgo y por otro, las investigaciones relacionadas con las artes plásticas que desde hace unos años se están llevando a cabo para recuperar a las mujeres artistas “perdidas”, borradas de la Historia del Arte. De pronto, surge algo que te empuja a empezar a contar.
2.- ¿Tienen tus protagonistas femeninas
algún referente real?
Sí, claro, pero no de un personaje en concreto sino de muchos. Inés se parece a alguien que conocí y Amalia tiene rasgos de muchas de las pintoras de esa época como Ángeles Santos, Remedios Varo y Leonora Carrington, que también inspira la peripecia final de Elisa. Entre los masculinos también hay mucho trabajo de “Dr. Frankestein” que es lo que solemos hacer para crear personajes: coger partes de aquí y de allá, a veces sin ser muy conscientes, y coserlas para dar forma a la criatura. Por ejemplo: el personaje de Angelín se inspira en un guerrillero cántabro muy famoso, Juanín, pero por supuesto no es él del todo, tiene otra dimensión.
3.- Los paisajes supongo que los conoces pero, ¿existen el balneario y la Casa del Alemán? Me refiero a si hay edificios reales que te hayan servido como base de estos edificios. El balneario de Puente Viesgo, claro que sí, es un centro turístico importante. Está muy cambiado y modernizado y se parece poco a lo que fue en el siglo XIX, así que me fui al de Las caldas del Besaya, que parece detenido en una foto de época. La casa del alemán, sin embargo, es pura invención: no existe una casa así. Como era un personaje importantísimo en la novela tuve que “construir” yo misma, según lo que necesitaba la historia.
https://balneariodepuenteviesgo.com/
4.- La documentación que manejas referida
a las tradiciones, ¿te ha llegado por vía oral o has utilizado documentación
escrita?.
Sobre todo parten de mis recuerdos infantiles y de las tradiciones populares de Cantabria que si son de origen oral. También de conversaciones con amigos mucho más versados que yo en estas cosas como Marcos Pereda, escritor cántabro.
5.- En la novela hay un claro guiño a la “Rebeca” de Alfred Hitchcok, ¿algún guiño más que nos hayamos perdido?
Hay muchos guiños para los cinéfilos: muy claramente, Star Wars, Jules y Jim de Truffaut, La mujer del teniente francés de Karel Reisz y Ojos negros de Mijalkov,pero también cine español como Cielo negro de Manuel Mur Oti y Arrebato de Iván Zulueta. Y una película que me gusta muchísimo y es poco conocida: Fotografiando hadas de Nick Willing. El cine siempre está presente en todo lo que escribo, también por deformación profesional, las imágenes me persiguen…
6.- ¿Cuánto tiempo te ha llevado la
escritura del libro?
Año y medio, pero porque sufrió un parón de unos cuatro meses por culpa mía -no de la novela-y otros compromisos laborales. De todas maneras, salimos en la fecha prevista.
7.- En la construcción de la novela,
¿conocías el final cuando comenzaste a escribir la historia?
Sí, lo cierto es que tenía clara la trama principal, la intención y el objetivo final, incluso la imagen que cierra la novela. No tanto las subtramas o los personajes, esos fueron desarrollándose, creciendo a lo largo del proceso. Siempre trabajo así, si no, me perdería. Soy muy ordenada y estructurada por deformación profesional: cosas de guionista de cine, supongo.
8.- El jardín de los espejos es un título
sugerente y que le va muy bien a la novela, ¿lo elegiste tú? ¿Qué significado
tiene para ti?
Sí, lo propuse yo, aunque suelo dar a elegir entre varios a la editorial. A mi editora, Carol París, era el que más le gustaba. Creo que refleja -nunca mejor dicho- el tema principal de la novela, que no es otro que el poder de la imagen y su capacidad para atrapar el tiempo, detenerlo y mostrarlo de una manera renovada, obligando a mirar la realidad con ojos nuevos. En El jardín de los espejos el tiempo es una capa transparente y delicada que no nos separa sino que nos une.
9.- Sabiendo que es un tema escabroso del
que charlamos en nuestro encuentro. Si tuvieras que colocar tu novela dentro de
un género, en cuál lo harías.
¡Esa sí que es una buen pregunta! Supongo que podría tener la etiqueta de novela gótica con suspense como las de Daphne du Maurier… También de relato histórico-fantástico, si es que eso existe. Para mí es un cuento de hadas con niñas perdidas, madrastras, brujas y ogros: en esa forma narrativa he crecido y estoy muy cómoda. Pero creo que es mejor que lo decidáis vosotras, las lectoras.
10.- Para finalizar, ¿qué tipo de literatura consumes habitualmente, qué te gusta leer?
Me queda claro que tengo que leer su libro. Gracias por esta estupenda entrevista.
ResponderEliminarBesotes!!!
Este libro es una delicia y Pilar aun más. Un besazo.
EliminarSiempre me resultan muy interesantes las entrevistas a los autores y muchas veces, me pasa que un libro en el que no me había fijado o incluso que ya había descartado, pasa a ser un deseo gracias justo al oír/leer al autor hablar de él.
ResponderEliminarUn beso
Para mi es una forma maravillosa de completar una lectura. Y si la novela me ha fascinado, aun más. Gracias por pasarte. Un beso
EliminarFue un encuentro muy grato, como especial fue verlas aunque sea, a través de una pantalla de un dispositivo. Un tiempo que me pareció que volaba de lo entretenido que me resultó este encuentro adaptado a la actual situación sanitaria.
ResponderEliminarGracias por la mención a mi blog, espero que muy pronto, podamos volver a compartir con otro/a autor/a.
¡Muy buena entrevista!